1. Corta las cebollas en medias lunas y ponlas a pochar en una sartén con un chorrito de aceite. Sazona y cocínalas durante 20 minutos aproximadamente, hasta que se caramelicen.
2. Añade el shitake cortado en tiras y rehoga hasta que la seta se ablande.
3. Tritura el conjunto con la batidora e incorporar el resto de ingredientes y volver a triturar.
4. Poner en un recipiente y conservar en la nevera.